El proceso en la toma de decisiones en la empresa

En Intelema, entendemos que la toma de decisiones va más allá de elegir entre opciones; se trata de un proceso que refleja la cultura, los valores y el espíritu humano del individuo y de la organización. Nuestra experiencia nos enseña  que cada decisión tiene el potencial de influir significativamente en la eficacia y el bienestar tanto de las personas como en las cuentas de resultados.

Qué es la toma de decisiones y qué ventajas ofrece

En un entorno donde las dinámicas de mercado son cada vez más desafiantes, la capacidad de tomar decisiones  bien fundadas y que “den en la diana” se convierte en una ventaja competitiva esencial. La toma de decisiones consciente y alineada con el propósito y valores de la empresa fomenta una cultura organizacional sólida, promueve el desarrollo del talento y garantiza la permanencia y la sostenibilidad a largo plazo.

Las decisiones tomadas con plena consciencia no sólo guían a la empresa hacia la realización de sus metas estratégicas, sino también profundizan el vínculo de los empleados con el propósito fundamental de la organización. Al hacerlo, se eleva tanto la satisfacción como el desarrollo profesional y personal de cada individuo en el equipo. Es esta profunda sinergia entre estrategia, valores fundamentales y el propósito humano lo que verdaderamente empodera a las organizaciones para afrontar adversidades y aprovechar nuevas oportunidades, distinguiéndolas en el competitivo entorno de mercado.

Explorando el impacto del inconsciente en el liderazgo

A lo largo de nuestros años de trabajo, hemos observado que muchos líderes y directivos luchan con un conjunto invisible de barreras que afectan sus decisiones: su inconsciente. Trabajar para comprender y gestionar estas dinámicas internas clarifica la toma de decisiones y mejora la salud y rentabilidad de la organización.

Este enfoque permite que el líder comprenda mejor sus propias motivaciones y las de su equipo, creando un entorno más saludable y dinámico para la toma de decisiones. Por ejemplo, hemos ayudado a líderes a reconocer cómo su necesidad de controlar cada detalle estaba limitando la creatividad y eficiencia de sí mismo y de sus equipos.

Adaptación y aceptación. Claves para la toma de decisiones en el mundo empresarial

La diferencia entre adaptación y aceptación es fundamental conocerla. La adaptación, aunque necesaria, puede ser desgastante a largo plazo; en cambio, la aceptación implica un desarrollo y bienestar más auténticos. Por ejemplo, expresiones como «no me queda otro remedio» o «lo voy a hacer, pero va a salir mal» reflejan una actitud de adaptación forzada que puede causar dolor y agotamiento en la toma de decisiones. En contraste, la aceptación se manifiesta en frases como «menos mal, ya era hora» o «esto nos va a ayudar a avanzar muchísimo», las cuales indican una disposición a abrazar nuevas oportunidades con entusiasmo y visión ampliada. 

Al fomentar la aceptación, los líderes pueden expandir su visión y potenciar un liderazgo sereno. Esta transformación mejora las decisiones individuales y también fortalece la cultura organizacional, haciéndola más resiliente y adaptable a los cambios.

La presión de los líderes en el proceso de toma de decisiones

La toma de decisiones en el liderazgo conlleva una responsabilidad significativa, ya que cada elección puede impactar profundamente tanto a las personas como a la rentabilidad de la empresa. Es crucial que los líderes sean conscientes de la trascendencia de sus decisiones y reconozcan tanto sus capacidades como sus limitaciones.

  • Consciencia del impacto. Los líderes deben ser plenamente conscientes de que sus decisiones tienen el poder de influir positiva o negativamente en sus equipos y en los resultados generales de la empresa. Esta comprensión debe guiar su proceso de toma de decisiones, asegurando que se consideren todos los escenarios y consecuencias potenciales.
  • Aceptar capacidades y limitaciones. Es esencial que los líderes reconozcan y acepten sus propias capacidades y limitaciones. Esto implica una honestidad interna sobre qué pueden hacer efectivamente y qué aspectos necesitan el apoyo de otros. La delegación efectiva es un componente clave en este proceso, permitiendo que cada miembro del equipo aporte sus fortalezas al logro de los objetivos comunes.
  • Construir un equipo de confianza. Los líderes que trabajan su inconsciente saben que no están solos en sus funciones y dependen de la fortaleza de su equipo. Aprenden a fomentar un entorno donde cada individuo tenga un rol bien definido y pueda contribuir al máximo, lo cual facilita una toma de decisiones más dinámica y efectiva.
  • Fortalecimiento interno. La presión de tomar decisiones importantes puede ser abrumadora. Por ello, es vital que los líderes se fortalezcan internamente, trabajando en su autoconocimiento y desarrollo emocional para manejar mejor el estrés y la ansiedad que estas situaciones pueden generar.

Errores comunes en el proceso de toma de decisiones en las empresas

El proceso en la toma de decisiones en la empresa
Carmen Sánchez CEO de Intelema

Muchos errores en la toma de decisiones se deben a patrones repetitivos no reconocidos. Estos patrones pueden ser emocionales, mentales o comportamentales, y a menudo conducen a resultados insatisfactorios. Para abordar este problema, en Intelema empleamos técnicas de coaching profundo que desafían estas rutinas al hacer preguntas introspectivas que llevan a los líderes a una mayor autoconsciencia y comprensión de sus propios procesos internos.

Este enfoque se centra en romper el ciclo de la ‘acción reactiva’, donde los líderes actúan bajo presión o urgencia sin considerar alternativas más estratégicas. A menudo, los errores provienen de mantener un equipo basado más en afinidades personales que en competencias, lo cual puede crear dependencias y limitar el desarrollo del potencial del equipo. Además, un enfoque excesivo en los detalles operativos puede desviar la atención de las estrategias a largo plazo, esencial para la sostenibilidad y el crecimiento.

El manejo del inconsciente ayuda a los líderes a distinguir entre ‘hacer por hacer’ y realizar acciones que son verdaderamente importantes y efectivas. Animamos a los líderes a salir de la gestión de lo urgente y a centrarse en lo importante, facilitando una transición de trabajar en lo ‘micro’ a influir en lo ‘macro’.

Mediante la aplicación de estas técnicas, los líderes aprenden a identificar y modificar conductas que no sirven a sus objetivos ni a los de sus equipos. Se les enseña a formar equipos no solo con personas que les agradan personalmente, sino con individuos cuyas habilidades y capacidades realmente complementen y fortalezcan el colectivo. Este enfoque empodera a los líderes para adoptar nuevas estrategias más efectivas, promoviendo un entorno en el que las decisiones  son acertadas, proactivas y alineadas con la visión a largo plazo de la organización.

La importancia de la comunicación efectiva en el proceso de la toma de decisiones

Una comunicación clara y útil es crucial en el proceso de toma de decisiones. Una buena comunicación  facilita la claridad y la comprensión entre los miembros del equipo e impacta directamente en la eficacia y eficiencia de las operaciones. A continuación compartimos unos consejos para mejorar la comunicación en la toma de decisiones:

  • Reuniones efectivas y concisas. Implementar reuniones cortas y con pocas personas, centradas en objetivos claros, mejora significativamente la productividad y los resultados en la toma de decisiones. 
  • Expresión y escucha activa. Es fundamental para los líderes aprender a expresar claramente sus pensamientos y sentimientos, así como a escuchar activamente las necesidades y preocupaciones de los demás. Esto ayuda a crear experiencias útiles, saludables y rentables dentro de la organización.
  • Uso de tecnología avanzada. Utilizar tecnologías y sistemas de información avanzados que ayudan a mantener la claridad y precisión, permitiendo a los equipos avanzar con confianza en sus proyectos.
  • Espacios para pensar. Fomentar la creación de espacios para la convivencia y la reflexión, donde los equipos pueden compartir ideas y fomentar la innovación.
  • Comunicación con propósito. Comunicar con un propósito claro y entender ‘el para qué’ detrás de cada interacción es vital para construir un ambiente donde cada empleado se sienta valorado y parte integral de los objetivos más amplios de la empresa.
  • Poner un límite en el tiempo. El tiempo es uno de los recursos más escasos y más valioso. Tenemos la tendencia a hablar en exceso, a escuchar en exceso, a tratar temas incongruentes y sin sentido.  Es de vital importancia tener este tema en cuenta.

Este enfoque integral mejora los procesos de toma de decisiones y también refuerza la cultura de apertura y mejora continua en toda la organización.

Transformación de la cultura empresarial a través de decisiones conscientes

La transformación de la cultura de una empresa a menudo comienza con cambios en cómo se toman las decisiones. Al guiar a los líderes para que se vuelvan más conscientes de sus procesos internos y cómo estos afectan sus decisiones, hemos visto cambios positivos significativos en las culturas organizacionales de nuestros clientes.

En Intelema, creemos que la verdadera maestría en la toma de decisiones proviene de un profundo entendimiento del propio interior y de cómo este influye en nuestras acciones y en las de aquellos que nos rodean. Nuestro enfoque prepara a los líderes para afrontar los desafíos actuales y ayuda que estén bien equipados para aceptarse y prosperar en un futuro incierto. Te invitamos a conocer nuestros programas de coaching y solicitar una primera sesión de liderazgo.